La moral del ciudadano y los cien años de perdón para el que roba al ladrón

Por mucho que la sabiduría popular diga que quien roba a un ladrón tiene cien años de perdón, lo cierto es que robar es un delito ante la ley y da igual si el robado es el vecino del quinto o la entidad bancaria la empresa que desarrolla un software necesario para que funcione tu ordenador (aunque ya te digo que ese software en el que estás pensando no es, para nada, imprescindible).

Pero vamos a centrarnos en los dos conceptos que quiero que sean el centro de atención del artículo. Por un lado tenemos la moral del ciudadano y por otro todo lo que tiene que ver con lo de robar al ladrón. Como muchos de los que me leéis hace ya tiempo que no manejamos un libro de filosofía, veamos lo que dice la RAE sobre lo que es la moral:

Moral. adj. Perteneciente o relativo a las acciones de las personas, desde el punto de vista de su obrar en relación con el bien o el mal y en función de su vida individual y, sobre todo, colectiva.

Ya de entrada, vemos que la RAE nos deja claro que el concepto de moral tiene mucho que ver con «una interpretación individual del bien o del mal» o dicho de otra forma, que lo que tú opinas que está bien, no tiene por qué coincidir con mi opinión y viceversa y, por descontado, no tiene nada que ver con la legislación vigente, de ahí que robar a un ladrón, igual no te otorgue perdón durante cien años, pero que como no lo denuncie él, se ha quedado sin su botín.

Y ahora vamos a ver si determinamos qué es eso de ser un ladrón. La RAE nos dice:

Ladrón. adj. Que hurta o roba.

Pues igual no nos aclara nada, porque lo que que un ladrón es el que roba ya lo sabíamos, así que vamos a ver qué nos dice la RAE sobre lo que es robar:

1. Robar. Quitar o tomar para sí con violencia o con fuerza lo ajeno.
2. Tomar para sí lo ajeno, o hurtar de cualquier modo que sea.

En montones de ocasiones, es necesario leer varias acepciones de la RAE para completar el significado, porque también tenemos claro que para robar, no es necesario aplicar la violencia. También roba el que lo hace de forma elegante y sin agredir a nadie. y ahí es donde vamos. A Alguien a quien debes dinero y a quien no le puedes pagar, y que decide quedarse con tus cosas y seguir reclamándote la deuda. ¿Le llamarías ladrón? Yo sí, y estoy seguro que muchas personas también estarían de acuerdo conmigo en que quien actúa así, es un ladrón. Pero resulta que la ley no opina lo contrario y si tú tienes un hipoteca y no puedes pagar, el banco se quedará con tu casa, te pondrá de patitas en la calle y te seguirá reclamando la deuda. y eso es absolutamente legan en España.

Vale. Pues ahora que ya tenemos claro que tanto la persona esa que se queda con tus cosas y te reclama la deuda, probablemente aplicando con violencia cierta presión en tus rodillas y el banco que se queda con tu casa, tal vez solo enviándote una carta nada violenta, y te sigue reclamando la deuda de tu hipoteca; les aplicamos la definición de la RAE y dejamos claro que ambos son ladrones.

Hablemos ahora sobre eso de los cien años de perdón para quien roba al ladrón. Resulta que una empresa de pentesting denominada IOActive ha demostrado cómo se puede reventar un cajero automático usando simplemente un smartphone y una app que lo que hace es explotar ciertos fallos conocidos en los cajeros a través de su puerto NFC. Todo consiste en realizar múltiples lecturas simultaneas hasta que el cajero entrega un error por desbordamiento de buffer y acaba corrompiendo la memoria del sistema operativo (que desde luego, no es ni mucho menos, el último Windows 11 que está a punto de salir al mercado). Al parecer, usando esta técnica, los delincuentes, aunque después de este artículo ya no pensamos tanto en que lo sean, han conseguido vaciar más de mil cajeros automáticos en EEUU y entre ellos, buena parte son del Banco Santander.

Parece que hay muchas dudas de que sea tan simple tirar abajo un cajero automático y que los esfuerzos de las empresas de seguridad van encaminados a conseguir que los ciberdelincuentes no puedan obtener la app en cuestión, ya que de ser cierto, podría ser un caos económico el que miles de inconscientes se lanzasen con sus móviles contra los cajeros automáticos de todo el mundo.

Y ahora la muletilla final: Si alguien roba a ese ladrón que se queda con tus cosas y te reclama lo que le debes aplicando tensión a tus rodillas o tu vida en general, aunque sea sin violencia y desde un despacho, y se le roba de forma elegante por culpa de un error a la hora de proteger tu dinero; ¿se le otorgarán cien años de perdón desde esa moral que ya hemos visto que es una cuestión absolutamente personal?

Por cierto. Si encuentras esa app por la Dark, no te olvides de mi y considera que vayamos a medias.

Author: fbno

Sarcástico, irónico y cáustico. Agnóstico, irreverente, apolítico, apátrida y ciertamente asocial. Defensor del abstencionismo reflexivo y amante de la penúltima cerveza y del Rock.